"El 30 de junio mi hermana decidió tomar decisiones incorrectas", comienza diciendo a la cámara Nicholas Prosper, horas antes de asesinar a su madre, la argentina Juliana Falcón y a sus dos hermanos. El joven dejó un testimonio audiovisual en sus redes sociales antes de cometer el atroz crimen. Su justificación estaba en un episodio "de la primera temporada de los juegos de The Walking Dead".
"El 30 de junio mi hermana decidió tomar decisiones incorrectas en un episodio de la primera temporada de los juegos de The Walking Dead. Y por eso su rostro será mutilado más de lo necesario”, explicaba Prosper a cámara. La grabación dura poco más de un minuto y data del pasado viernes 13, el mismo día que, en horas de la madrugada, mató con un arma de fuego a los tres integrantes de familia en un complejo de torres llamado Leabank.
En el video, Prosper aparece parado frente a la cámara vestido con una remera negra y un sombrero amarillo y mantiene un relato absurdo con referencias a un videojuego de la serie estadounidense The Walking Dead.
Allí sostiene que era el elegido para concretar una misión. “Me dejo guiar”, aseguró, quien ahora está acusado de homicidio y otros delitos relacionados con el abuso de armas de fuego.
Además, agrega que va a mutilar la cara de su hermana (Gisell, de 13 años, a quien luego asesinó) y luego continúa hablando haciendo alusión a un mundo ficticio: “También recuerdo un video de Living Echoes en Youtube. Lo mejor de Lee y Clementine, edición definitiva. Es una recopilación. Y decidió matar a Larry frente a Clementine. Y luego me enteré de que decidió matar a St. John’s frente a Clementine”.
Luego concluye: “Soy el elegido, elegido por Clementine. Me dejo guiar, como los cristianos se dejan guiar por Jesucristo, y no habrá más asesinatos de Larrys frente a Clementine. No habrá más asesinatos de St. Johns frente a Clementine y el contenido general de Clementine se preservará, se maximizará. Ese es el mensaje que quiero transmitir”.
El triple crimen
Horas después del posteo las autoridades inglesas fueron alertadas por los vecinos de Luton sobre varios gritos y disparos en el departamento de los Prosper. Cuando la policía se acercó al lugar encontró a Juliana Falcón, de 48 años y sus hijos Giselle (13) y Kyle (16) asesinados.
Los tres habían sido baleados. Rápidamente comprobaron que el autor del triple crimen había sido Prosper, quien fue detenido a unos 600 metros del complejo donde residía con su madre y sus hermanos. Al ser requisado, hallaron el arma homicida entre sus pertenencias.
El joven ya fue sometido a una audiencia acusatoria, a cargo del juez del distrito Robert Borwick. Las autoridades ordenaron que en los próximos días se le realicen las pericias psicológicas correspondientes, de cara al juicio que comenzará el próximo 5 de diciembre.